Poesía selecta de María Lefebre

Se murió Violeta Parra,
flor y vid de la canción
se le rompió el corazón
como cuerda de guitarra.

En los bosques de Chillán
las loicas están llorando
con el corazón sangrando
murió la Violeta Parra.

Su sangre besó la tierra
como postrer despedida,
era tan honda la herida
tan honda como la pena.

El viento le contó al río
el río a la hierba buena
dicen que murió de pena
sobre su vieja guitarra.

 

María Lefebre