Un escritor de apellido Palomino, preparaba un libro sobre el Dante y su “Divina Comedia”. Por ese motivo, llegó a la oficina de don Emilio Vaisse (Omer Emeth), sacerdote de reconocido talento. Comentarista de “El Diario Ilustrado”.
Don Emilio asequible, abandonó sus ocupaciones para atender al visitante. Después de una cansada charla para que Vaisse diera su opinión sobre lo solicitado, éste, ganado por cansancio, dijo: “hay algo que no le puedo perdonar al Dante y es que su infierno, tan bien distribuido, no le diera un lugar de preferencia a la gente inoportuna”.
El señor Palomino muy honrado insertó en su libro la opinión de don Emilio.